Vulnerabilidad

Cada cierto tiempo aparece una palabra en nuestro panorama que se hace imprescindible en todos los campos Recursos Humanos, Educación, etc.  Hoy recupero una que sonó con fuerza este pasado año: VULNERABILIDAD.

La vulnerabilidad está de moda. El líder indestructible ya no se lleva, ahora  las empresas buscan líderes vulnerables. Un jefe que no es capaz de mostrar sus debilidades no empatiza con sus empleados. La humanidad se valora y además genera confianza.  Conforme a «El triángulo ganador» de Acey Choy, el líder actual debe ser: asertivo, empático, vulnerable.

Los Motivational speakers también lo saben, por eso en sus charlas nos muestran sus «fracasos». Qué mejor manera de generar empatía que sentir que quién nos habla tiene nuestros mismos problemas, es una persona normal como nosotros y también se ha caído varias veces hasta llegar hasta ahí. Y qué mayor motivación:  si él ha podido, nosotros también.

Mostrar los miedos, las emociones, las inseguridades que todos tenemos nos hace iguales.  Las personas pluscuamperfectas generan desconfianza y nos ponen a la defensiva. He encontrado muchos artículos sobre este tema. Aplaudo sin duda la apuesta, a mí las corazas y los personajes me van poco. Pero seamos realistas ¿realmente todo el mundo se puede permitir quitarse la coraza en cualquier trabajo? ¿podemos mostrarnos inseguros cuando estamos vendiéndonos o vendiendo nuestro producto? ¿deben un médico, un policía, un psicólogo, o el profesor de mi hijo ser vulnerables o preferimos que se muestren seguros?. Sin duda hay  profesionales que deben ser sensibles a las situaciones o necesidades de los otros pero tanto como vulnerables me atrevería a decir que no. Por otro lado  estas personas también necesitan su reducto para mostrarse tal cual son.

Siempre defenderé que uno debe ser auténtico, y que es agotador llevar una máscara todo el tiempo, pero mostrarse vulnerable a diestro y siniestro tampoco. Apostaría por ser selectivamente vulnerable, esto es seleccionar a aquellas personas con las que podemos mostrarnos absolutamente auténticos.

Viajemos un momento en el tiempo. Justo cuando nuestras abuelas eran jóvenes. Ellas  no tenían tiempo para cursos de autoestima,  ni de atención plena ni de crecimiento personal. Eran mujeres fuertes, con vidas duras,  que hacían , deshacían, cuidaban y tiraban de todos….Estaban atentas por la cuenta que les traía, y tenían poco tiempo para pensar en sí mismas, sin embargo su sabiduría ya les indicaba que necesitaban un rincón donde desahogarse, y donde poder mostrarse vulnerables.  Y este lugar sanador y terapéutico era EL LAVADERO. Sí, el lavadero. No las subestimemos. Eran muy listas. En ese coto privado ellas, compartían penas, alegrías, consejos, cotilleos y algún chiste verde. Era su lugar seguro.

El ser humano siempre ha buscado refugio entre sus iguales , somos un animal social y necesitamos sentirnos queridos y aceptados.

Volvamos a la actualidad, tanta tecnología nos está dejando huérfanos de grupos naturales de terapia. Sin embargo todos seguimos atesorando nuestros lugares seguros donde poder mostrar nuestro lado más vulnerable. Personas ante las que te puedas quitar la máscara, no disimular tu tristeza, o tu ira. Saber que no serás juzgado y que eres aceptado como eres.

Pues lo más difícil no es mostrar lo menos amable de cada uno ante desconocidos sino ante conocidos sabiendo que te expones a defraudarles, y a no cumplir sus expectativas.

Y cuando comprendes que a ese núcleo nunca le vas a defraudar sientes que puedes ser tú, con tus luces y tus sombras. Estas son las personas que vale la pena cuidar.

¿QUÉ CONLLEVA LA VULNERABILIDAD?

De todas las lecturas que he hecho sobre la vulnerabilidad sin duda me quedo con la TED de Brené Brown que es maravillosa y va mucho más allá hilando ésta con otros aspectos ya en este blog comentados como la autenticidad, la compasión, el no tener el control de los acontecimientos. Todo esto es ser vulnerable.

EL CORAJE DE SER IMPERFECTOS

Dar pasos inciertos,  tomar la iniciativa y asumir riesgos,  estar expuestos, física o emocionalmente.

Para Brené Brown intentar anestesiar todo esto, «mirar hacia otro lado», es anestesiar las partes positivas también. No podemos seleccionar las emociones, no podemos sentir la alegría sin haber sentido la tristeza, la única opción es vivirlas todas plenamente.

 

 

https://www.ted.com/talks/brene_brown_on_vulnerability?language=es